Se acabó el año, lectores, así que vengo a agradecerles profundamente por haberme estado leyendo durante todo este año, por haberme seguido y por haberme apoyado.
Hace exactamente un año ya que estaba planeando mi viaje a Inglaterra y menos de 10 días después partí hacia allá, hacia un nuevo destino, hacia una nueva vida. Mi idea era no regresar a México, pues estaba cansado de la falta de apoyo que había en mi país, de la redundancia comercial, del albur político y de la broma que nos envuelve a todos los mexicanos con ignorancia e incultura. Pero desgraciamente llegué al Reino Unido para darme cuenta de que en todos lados es lo mismo. Sí, noté que era un país con mejor economía y cultura, pero también atascado de modernismo hipócrita y de mileniales idiotas. Sin embargo, todos los aspectos positivos que obtuve de mi estadía allá, se quedaron grabados en mí. Viví una experiencia inolvidable en la que conocí aspectos de mí mismo que no conocía, maduré como persona y entendí cómo es la realidad en donde quiera que estés. Fue un viaje de aceptación y también de resignación. Hay ocasiones en que lo siento como un fracaso, pues como dije al principio, la idea era no regresar, pero heme aquí, de nuevo en México, escribiendo este post. Esa es la razón también por la que durante todo este año he descuidado mucho mis redes sociales, sobre todo en los últimos meses, pues la nostalgia empieza a apoderarse de mí, a entristecerme por no haber logrado mi objetivo, etcétera. No obstante, son cosas por las que uno tiene que pasar como ser humano, debe aceptarlas y aprender a vivir con ellas.
El problema de estos últimos meses, es decir, el verdadero problema, es que escribí lo que considero yo el mejor libro que he escrito en toda mi vida. Mi obra maestra, quiero pensar. Sin embargo, no tengo ni la más remota idea de qué hacer con él; ustedes saben que estoy muy en contra del sistema en general, por lo tanto me causa mucho conflicto la idea de mandarlo a editoriales. Aun así, me tragué el orgullo y lo envié a 2 de ellas, una de Canadá y otra de Londres, luego de haber visto a otras muchísimas opciones de diferentes países. Mi libro fue rechazado por la editorial de Canadá y la propuesta que me hicieron en Londres no me pareció nada conveniente; querían vender el libro sólo en digital y quedarse con mis derechos de autor. ESO JAMÁS.
En fin, el libro está en inglés y ese es el problema; que la gran mayoría de mis lectores o sólo leen en español o de plano no tienen mucho interés en apoyarme en otro idioma. Podría imprimir el libro y venderlo pero estoy 100% seguro de que sufriría el mismo destino que Terra Gaiden, el cual es un excelente libro y sorprendentemente tiene muy, pero muy buenas críticas, pero que fracasó en ventas por el simple hecho de estar en inglés. Venderlo yo mismo en digital sería la misma tontería, pues ya he hecho el intento con otros libros y ninguno me ha funcionado. ¿Qué hacer entonces con este libro, con esta importantísima obra que fue producto real de mi experiencia en Inglaterra? Por eso la depresión, mis lectores, y por eso el tremendo descuido en los últimos meses de mis redes sociales.
En la ConComics pasada, como se pudieron haber dado cuenta, me fue extremadamente bien. Jamás me había ido tan bien en una convención, salvo en otra ConComics que fue en abril del 2016, pero ésta sigue llevándose la corona. El evento me dio la suficiente motivación como para seguir adelante, como para seguir escribiendo en español y continuar echándole ganas a mi carrera. Espero, claro, que para el año que viene puedan seguir apoyándome, pues de verdad lo necesito dadas las catastróficas (y, a su vez, enriquecedoras) circunstancias que viví durante éste.
Agradezco pues, una vez más, a todos ustedes. Nos veremos el año que viene en futuros eventos. Trataré de escapar de esa angustia que me ha dado The Reaper's Thorn, mi libro en inglés y a ver qué hago con él. Mientras tanto, haré todo lo posible por actualizar mis redes sociales y mantenerlos al tanto de todos mis proyectos y actividades. En el siguiente post, de hecho, hablaré sobre mi canal de YouTube en inglés, el cual parece que ya es un éxito.
Que pasen feliz año nuevo todos.
Saludos.
