lunes, 10 de octubre de 2016

MADELEINE VS LA SOCIEDAD



Pues bien, ya no es ninguna novedad el hecho de que todos mis libros se enfocan en la crítica social. Me tocó nacer y vivir en un país cuya sociedad escupe en los artistas e intelectuales. ¿El gobierno? El gobierno me vale madre, y creo que, hoy en día, a todos también. Las críticas, desahogos y ataques verbales que redundan en mis libros, y ustedes lo saben, siempre han sido contra la sociedad.

Pero creo que es buen momento para hacer algunas aclaraciones sobre Infierno Nix. Es preciso que ustedes, mis lectores, sepan que una cosa es el personaje y otra es el autor. No está de más empezar diciendo que yo no soy mis personajes y que pienso diferente a ellos. Hay que saber crear personas para poderlas manipular en tus historias. Y eso fue todo lo que yo hice con estos dos libros de tan polémicos resultados. Puede que se parezcan a mí (después de todo, yo los inventé, y obviamente son una parte de mí), pero tienen personalidades e ideologías distintas.

Hasta la fecha, cada quien tiene su interpretación sobre Infierno Nix, por lo que estoy seguro de que no es necesario revelar los secretos que se esconden en las entrañas de la novela. En ustedes está el ímpetu de resolver los acertijos y a su manera; recuerden que no hay ninguna verdad absoluta más que la mía, y esa es una que jamás explicaré. Así que la conclusión que saquen, supongo que es válida.

Sin embargo, y ya para dejarme de falacias, lo que realmente quiero aclarar es la carta a Dios que Madeleine escribió en el Capíutlo 7 del primer volumen. Ustedes saben cuál, la de "Querido Dios, tu mundo es una mierda".

Para algunos, este fragmento es considerado como un desahogo de una adolescente inmadura que por fin ha razonado la irrelevancia de "Dios" en la época contemporánea. Para otros, es el monólogo de una mujer encabronada con el catolicismo. Hay muchas opiniones, pero a final de cuentas, es una tirada de mierda a la sociedad. Que Madeleine culpe a Dios por lo espantosa que es la humanidad hoy en día, es otra cosa.

Se ha sabido desde tiempos mitológicos, que el ser humano siempre busca algo o alguien a quien culpar de sus problemas. Siempre. Sin excepción alguna. Y esto NO es ninguna inmadurez, porque hasta los más vejestorios, innatos en experiencia, lo hacen. Entonces, pues, si piensas que no, estás diciendo que todos los humanos somos inmaduros (y de cierta forma, lo somos).

Estimados lectores, yo no culpo a Dios por mis problemas. No soy católico ni tampoco ateo; soy agnóstico, pero al grado de haber llegado a ese punto del que hablé; de que si existe Dios o no, me importa un carajo. Francamente, no sirve de nada (algo que menciona Renzel en Código Morgana), pero ese es otro tema.

No tengo nada contra los ateos, ni mucho menos contra los católicos, tal vez contra los satánicos (tal y como lo menciona Madeleine en el volumen 2, en un diálogo con Vyse). El libro está abierto para todo público, excepto, claro, para la clase de gente a la que le tiro mierda en él.
Tal vez la carta sea un desahogo mío, "inmaduro" y/o "adolescente", si es que así lo desean ver. No negaré nunca que, como ya dije, mis personajes son una parte de mí, y aunque los haya hecho diferentes, no dejan de tener una parte de mi personalidad e ideología en las suyas.

Así que, para concluir, Infierno Nix y su carta a Dios es simple y sencillamente Madeleine contra la sociedad. Erick Landon contra el mundo, pero desde un punto de vista un poco distinto al suyo. Mi ideología va más a la par de Código Morgana, por si les interesa. Y aunque no se aleja tanto de Infierno Nix, sigue siendo una fuerte crítica social.

Para más información (un simple dato extra), los invito a leer este post que hice hace mucho:

http://ericklandon.blogspot.mx/2015/04/la-pesadilla-de-madeleine.html

Saludos y gracias por leerme.